martes, julio 18, 2006 Urdido por Osano-Wo a la(s) 11:45 a. m.

Aprovechando la reciente visita de Ratzinger Z a España, aqui os traigo el origen de la palabra que da el titulo a este post.

Se trataba de una costumbre frecuente entre los monjes benedictinos durante los siglos X al XII como medio para aligerar el cúmulo de esperma sin caer en los placeres carnales ni ofender a Dios. Este descubrimiento conmocionó los cimientos de la teología del momento, y fue tan celebrado que el Papa Celestino V autorizó su práctica en su bula de 1134 “Ad fallum suflaris”. Pero poco dura la alegría en casa del pobre, y tres años más tarde, su sucesor, Bonifacio VIII, de quién su leyenda negra asegura padecía fimosis, excomulgó a todos sus practicantes y envió a tantos como pudo a la hoguera con un cartel colgado al cuello donde se podía leer la palabra “Suflafallus”. Miembros de su curia se encargaron de extender la creencia urbi et orbe de que este hábito puede provocar una muerte lenta y dolorosa, yendo, por descontado, de cabeza al infierno.


Moraleja: Si retrocedes en el tiempo y te gusta comer pollas, ten cuidado, por que la Inquisicion esta a la que salta. Las mamadas son mortales de necesidad.

P.D: Estoy solo de nuevo.

Estoy escuchando: Masterplan - Falling Sparrow
 
2 comments:


At 8:58 p. m., Blogger Ethan

Como dice mí querida Samantha de Sex and the City: Mientras pueda ponerme de rodillas seguiré comiendo pollas.

 

At 10:13 a. m., Blogger probando

joder...con Jose siempre aprendemos todos cosas nuevas